Dicen los grandes escritores que ESCRIBIR ES, EN REALIDAD, REESCRIBIR. Y no puedo estar más de acuerdo.

Quienes nos dedicamos a la comunicación sabemos que escribir es repasar, limpiar, editar y corregir. Y este proceso es lo que diferencia un buen texto de uno mediocre.

Te sugiero que lo tengas en cuenta al preparar cualquier tipo de comunicación (oral o escrita): charlas, presentaciones, ponencias…

Pero, ¿cómo hacer una buena edición? ¿Cómo limpiar bien un texto? ¿Por dónde empezar?

Para ayudarte, te propongo que sigas estos 5 PASOS:

1 – Elimina palabras innecesarias. Es uno de los errores más comunes, la acumulación de palabras vacías o de relleno. Vigila los nexos entre frases que puedan sustituirse por un punto, una coma o un punto y coma. Palabras como: “así”, “además”, “también” “en definitiva”, “para concluir”… 

2 – Busca redundancias. Elimina frases (o párrafos) que expliquen de manera distinta lo que ya has dicho anteriormente. Alargar explicaciones suele enturbiar los textos.

3 – Vigila las repeticiones de palabras. Si te cuesta detectarlas, emplea el buscador de tu procesador de texto. Para sustituirlas, haz un listado de sinónimos que te ayude. Por ejemplo, si empleas a menudo la palabra “técnicas”, valora sustituirla por términos como: “recursos”, “procedimientos”, “métodos”, “procesos”, “sistemas”…

4 – Lee el texto en voz alta. Te ayudará a detectar frases excesivamente largas y farragosas.

5 – Deja pasar un día para la última lectura. Esta es una de las claves de la corrección. Dejar pasar un día antes de una última lectura te dará perspectiva. Si quedan errores, los identificarás al instante.

Solo con que apliques estos cinco pasos, tus textos se verán más limpios. Recuerda… ESCRIBIR ES REESCRIBIR 😉